LLEGÓ LA MENSTRU

En estos días de encierro que se juntan con el dolor de pecho premenstrual y el dolor de ovarios cuando nos visita la compañera del mes, he decidido revisualizar el anuncio polémico del líquido rojo que representa la regla de la mujer, un despropósito...

Me parece que a estas alturas de la vida el criticar un anuncio por mostrar un color real de la regla, molestarte y hasta denunciarlo es de ser un completo cateto. Por ello voy a dar mi opinión a cerca del por qué existen este tipo de reacciones y por supuesto voy a darla acerca del vídeo.

Creo que es simple la razón por la que la gente se molesta, algo tan simple como arcaico, LA MUJER. Siempre hemos sido para el patriarcado el foco de todos sus problemas, si hasta nos quemaban por brujas.

El problema no es la sangre que se muestra o el líquido rojo, si no la procedencia de ese fluido. Estoy convencida de que si apareciese un hombre sangrando de un brazo por un corte y que se publicite con ello una marca de tiritas, todos lo verían súper lícito y maravilloso, pero no les pongas sangre que sale por el coño, que les da un parraque, cuestión de COÑOFOBIA. Sí, habeís leído bien, COÑOFOBIA, la gente siente asco y miedo con todo lo relacionado con la vagina, principalmente por desconocimiento, que todavía existe gente que te dice que meamos por el clítoris o peor aún, que ni siqiuera saben ubicar las partes de una vagina... Esto lleva ocurriendo toda la vida, la falta de información a cerca de la sexualidad vaginal siempre ha sido tabú y considerado como algo asqueroso y sucio.

Llega a ser algo tan surrealista el que ver sangre bueno ni siquiera, porque dudo mucho que hayan usado sangre real, se convierta en polémica por el simple hecho de que sale de la vagina que demuestra el grado de inteligencia que tiene el mundo. Una muestra más de la denigración y las desigualdades que tenemos que sufrir las mujeres por el simple hecho ser haber nacido siendo mujer y tener que superar un proceso biológico natural.

Algo que siempre me ha parecido curioso es la aceptación generalizada de la sociedad

de hacer pasar un líquido azul como sangre, quizá y solo quizá (guiño guiño codazo codazo) se acepte ese líquido por ser azul, el color que asignado a dedo hace referencia al género masculino, llamadme loca pero compro esta reflexión al 100%.